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Inita Val

al son, son.. son

Te invito... y tú vas

Te invito... y tú vas Si después de las compras sabatinas les queda tiempo y quieren invertirlo en algo sumamente beneficioso, pasen por el Centro Cultural Corp Group a las 8 de la noche.

La Embajada Francesa en Venezuela invita al concierto "Dos Estaciones y Un Fin de Siglo", en memoria de Carlos Duarte y bajo la dirección del maestro francés, Olivier Grangean. Participación especial de Arnaldo Pizzolante y la Orquesta de Cuerdas de la Fundacion Mozarteum.

Yo tuve la oportunidad de ver a Carlos Duarte al piano, en dos oportunidades. Cuando estrenó en San Cristóbal "El Rap de la ciega" y luego cuando acompañó a la OSSB en un concierto homenaje a compositores latinoamericanos. Lamentablemente, Duarte falleció hace casi un año.

El concierto de este sábado se divide en dos partes. La primera es el estreno mundial "Las dos Estaciones" obra encomendada por la Embajada de Francia al compositor Paul Desenne (compositor venezolano y perteneciente al colectivo "Alzheimer", contra la senilidad de la cultura).

La segunda parte del concierto está dedicada a Carlos Duarte. Con Arnaldo Pizzolante al piano y el quinteto de cuerdas Mozarteum (en las cuerdas, por supuesto =/), se tocará "Quinteto de Fin de Siglo" de Duarte.

Invitados todos, entrada gratuita. Día sábado, 8 de la noche, Centro Cultural Corp Group.

Pd: Para los que no pudieron ver "Historias Mínimas"; el cine de Trasnocho Cultural, en Las Mercedes, la exhibirá el día lunes 15 de diciembre.

Escucho: Malandragem - Cassia Eller

Trovando ando...

Si lo bueno es gratuito, es doblemente bueno. Ciertamente lo del sábado fue bueno elevado a la enésima expresión.

Primero, conocer a Cecilia Todd y a Lilia Vera a través de sus magnificas voces, cantar acompañando a la menuda voz de Todd e impresionarme con el gañote de Vera fue exquisitamente bueno.

Y luego, comerme los ojitos viendo en fila a tres de los mejores cantautores latinoamericanos, guitarra en mano, estrenando "Cita con ángeles", fue impresionantemente bueno.

3 trovadores cubanos, Amaury Pérez, cantando a capella; Carlos Varela colocando a "Guillermo Tell" en mis favoritos y por último , Silvio Rodríguez, arrancando pedacitos de esa papa que tenemos en el pecho y que muchos como él, se empeñan en llamar corazón.

Yo he tenido una relación de vaivenes con la trova cubana. La verdad, es muy difícil vivir en San Cristóbal sin escuchar, siquiera una vez, algo de trova. Y es doblemente difícil si se estudió en la Ula. Son innumerables las madrugadas que gasté en Café Teatro Trashumante o en el café del Ateneo, deshojando las canciones de Silvio, de Merceditas, de Milanes, de Nicola y de Feliú, entre otros . Ni que decir de las penas y alegrías que se transformaron alrededor de las mesitas de madera del Teatro Transhumante.

Y el sábado, muchos años después de mi juventud, junto a alguien a quien se le puede dedicar canciones sin ningún pesar... otra vez... yo.. y la trova cubana. Fue muy bueno, de esos momentos que no se compran porque ya eran tuyos antes de ser.

Escucho: Guillermo Tell - Carlos Varela

Pd: Por favor, descalzarse de toda emoción política antes de responder a este tema. (Ahora con voz de hechicera) "que un maleficio caiga sobre el primero que pretenda desvirtuar mi noche del sábado haciendo referencias a la política". He dicho.

Sweet Bessie, hard gin

Sweet Bessie, hard gin - ¿No ves que es la emperatriz del blues? - gritó el hombre a través de la ventanilla, mientras señalaba a Bessie agonizando en las escaleras.

La enfermera miró hacia la oscuridad de la noche, afuera, y respondió al hombre: "Yo sólo veo a una negra borracha".

Año 1937. Horas después murió desangrada Bessie Smith, la reina del circuito TOBA, la Emperatriz del blues.

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Yo la encontré hace poco. Buscando canciones de Billie Holiday, me topé con Bessie y la quiero compartir con ustedes. "San Louis Blues" fue su gran éxito, yo prefiero "Me and my Gin", creo que la describe perfectamente.

Escucho: Todo lo que encuentre de Bessie Smith

Bienaventurados los sordos...

Ayer cuando iba a la UCV me monté en una camionetica, sonaba la radio a todo volumen. Al pagar el pasaje le pregunté al chofer, ¿qué era eso?...“Vagos y maleantes” fue la respuesta.

Debo confesar que soy una total y absoluta ignorante respecto a la producción underground venezolana. A mí se me acabó ese cartucho como a los 15 años.

A los 12 años compré mi primer acetato de producción nacional, era “Sin sombra no hay luz” de Sentimiento Muerto y lo escuché por tres años seguidos, ignoré olimpicamente a Zapato 3, a Residuos y a Desorden (disculpen por meterlos a todos en la misma bolsa, Zapato era una merd).

Después de los 15 y reforzada por un regalo de mi mamá, me dio por The Cure y la insolencia inglesa. Me infecté los oídos con Pulp (pop pop pop inglés), The Clash (todo un ritual de la juventud), odie a los Ramones, pero no tuve nunca nada en contra de Sex Pistols. De allí pasé a la música “contemplativa”, (risas) Dead Can Dance, Bjork y Sigur Ros. San Cristóbal es una ciudad ideal para esa música.

En ese momento escuché algo de David Tibet, no le paré mucho, hoy día es cantante de Current 93 y lo único que rescaté de esa época. Fueron esos años los que me hicieron descubrir que no quería llamar la atención, las cosas evidentes /estridentes me parecen sumamente vulgares. Adios a esa época.

Cuando tenía como 17 años di un vuelco en cuanto a gustos musicales, por el camino que iba estaba destinada a ponerme pinchos, vestirme de negro y hacerme todos los orificios posibles. Todo cambió un mes de mayo, cuando conocí a la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, en un concierto de cierre para un evento de la ULA.

Debo confesar, lo que más me atrajó de la Orquesta fue el clarinetista (risas), pero una cosa lleva a la otra. Boté todas las cintas de mi pasado cuasipunk (risas), boté hasta el afiche de The Cure que me regaló mi mamá... comence a coleccionar los resume de cada concierto, muy explicativos y a buscar música “clásica”.

Siempre he preferido a los rusos, el clarinetista decía que eso era obvio porque ellos dedican mucha pieza a los metales y poco a las cuerdas, “son emocionales y violentos, se parecen a ti”.

Por tres años y pico asistí religiosamente a cada concierto en la Unet. La primera entrevista que hice, fue a Marturet (mi director de orquesta favorito) y Carlos Duarte, pianista que falleció hace unos meses me brindó el mejor concierto de mi vida.

Pero el momento de abrir mis expectativas musicales so pena de convertirme en un "animal de Ateneo" (los dioses me salven) debía llegar.

En dos o tres años me he curtido lo suficiente como para formarme una opinión musical, pero me ha sido muy difícil adaptarme a la corriente underground venezolana, intentar conocerla ha sido darme con una pared. He asistido a eventos de nuevas bandas, a presentaciones, y de pana, NO soporto el ambiente, me dan una pereza impresionante, sus letras me dan risa, su fume me dan ganas de bostezar. Y la situación es irreversible, le pregunté al chofer quienes eran esos tipos que sonaban para asegurarme de que “nunca jamás” perderé ancho de banda en ellos. Patética la mención de "la catirota sabrosa, Erika de la Vega", por dieux!!!

Fin. He dicho. Ahora me dedico a vaguear musicalmente por ahí, de vez en cuando consigo algo que vale la pena y soy feliz. A veces pasa todo lo contrario.

Escucho Descarga cubana - Compay Segundo - Cachao

Ríase de la RIAA...

Voy de blog en blog, de foro en foro, de café en café y veo una preocupación recurrente, el P2P y las demandas de la RIAA. No hablo de preocupación nerviosa, estamos claros en que la RIAA se puede meter sus demandas en el bolsillo y en mi caso me niego absolutamente a pagar 60.000 bs por un cd, ni ahora... ni en el futuro.

Pero aparte de los elevados precios, lo que resulta patético son los argumentos de esta gente:

Se quejan porque sus ventas han bajado, pero no se pierden ni un chance para anunciar que Britney o Xtina, o Alejandro Sanz han vendido sopotocientos discos y se han ganado un disco de oro venusiano o de platino plutoniano.

Por otra parte hablan de derechos de autor, derechos que ellos pagan por una miseria o tracalean sin compasión. O me van a decir que pagaron (como realmente valen) los derechos de autor por la millonada que ahora hacen y que harán en el futuro con los cd remix, recopilatorios, grandes exitos, "inéditos", duetos virtuales de Celia Cruz (pobre mujer, no la dejan descansar).

Con esto quiero dejar claro que no me convencen los argumentos emocionales de la RIAA, en los cuales nosotros quedamos como "criminales" y ellos como "protectores del arte musical", la verdad es que ellos defienden su negocio, defienden sus reales y punto, es cuestión de "business". A la RIIA le ha salido un fuerte competidor, el P2P, que también puede convertirse en negocio. Ya les carga la competencia pues abarata los costos y no depende de los estudios de mercadeo de las disqueras.

Porque aparte del beneficio económico que resulta de bajar MP3 para nosotros (en todo este asunto, "potenciales clientes"), lo mejor es que tus gustos musicales no dependen de las "dictaduras de casas disqueras". De no existir el P2P seríamos esclavos de gente como Estefan, P.Diddy, OT o Mottola, estaríamos condenados a escuchar la música/artistas que a los engendros esos se les ocurriera vender y promocionar. No se imaginan lo difícil que es comprar música en una discotienda venezolana, es una fase de compra recolectora, realmente sufres, pareciera que los cds de Iglesias, Bisbal o Thalia se multiplican como conejos o la mala hierba.

Así que considerando que todo este asunto es por dinero, por negocio y por la competencia del mercado (que las disqueras dicen amar pero que apenas pueden aplastan).. ¡pues que se jodan!.. y para terminar, busque en P2P "Um a Um" de Tribalistas (vaya ahorrando para que cuando vengan a Caracas no se los pierda, porque el verdadero apoyo a un artista es asistir a sus presentaciones, y el verdadero trabajo de un artista es presentarse a menudo, ya estamos hartos de los artistas fabricados que no cantan en vivo ni el cumpleaños) y por último...ríase de la RIAA.

Escuchando: Um a Um - Tribalistas